F: Para finalizar esta entrevista en la cual nos contaste todo lo referido a tu proceso de visa y de inversión, ¿qué te gustaría contarle a esas personas que hoy están empezando a pensar o a tomar la decisión de migrar? ¿Qué recomendarías a personas que vayan a mirar a los Estados Unidos a través de una visa inversionista?

J: Yo creo que sin duda es importante la asesoría. La asesoría es fundamental y yo lo aprendí por todo este proceso. Creo que si una persona lo quiere hacer por su cuenta, probablemente puede hacerlo, pero es más complejo. Es más complejo porque tienes que ponerte a investigar cosas que no eres experto y por internet no vas a encontrar toda la información que necesitas ni tampoco va a ser la información correcta siempre. Entonces yo creo que la asesoría es clave. Yo le recomiendo a la gente que esté pensando en un proceso similar,  que no lo piense veces y que tomen la asesoría porque es una inversión, es una inversión para hacer una inversión, valga la redundancia, mucho más relevante.

F: Excato, más grande.

J: Exactamente. Entonces hay que pensarlo así. Hay que asesorarse bien porque si tú te asesoras ya simplemente es seguir el camino. Y obviamente, ahí sí, ya cada uno de acuerdo a lo que quiere y lo que siente y lo que le están mostrando, pues tome la decisión más acorde con lo que crea realmente que es en lo que se va a sentir cómodo, que crea que va a ser lo más eficiente en términos financieros también. Esa sí es una decisión muy personal. 

Por eso cuando llegamos a ustedes y vimos que era una empresa reconocida, que mucha gente ya había hecho este proceso, nos animamos un poco a conocerlos. Y obviamente, ya al hacer el proceso, nos sentimos muy cómodos, muy contentos.  La gente tiene que tener claro que la asesoría es fundamental. Y en ese sentido, si uno quiere llegar a tener un proceso exitoso de obtener su visa de inversionista, hay que hacerlo asesorado y hay que llegar a ese punto con la tranquilidad de que uno sabe en qué lo está invirtiendo, porque vuelvo y digo, es un cambio de vida. Entonces hay que hacerlo bien, con la tranquilidad de que no te estás equivocando.